martes, 1 de marzo de 2011

Persecución y acoso a la libertad.

Desde la Generalitat Valenciana es habitual una forma de actuar: todo son facilidades para unos y problemas para todos los demás. Todos los demás somos, para ellos, simples ciudadanos que defendemos la necesidad de disfrutar de un derecho fundamental, un derecho a la información desde una televisión pública.

Una nueva circular de Dora Ibars, Directora General de Promoción Institucional de la Generalitat, nos informa de la no aprobación de los estatutos que Gandia y Oliva han ratificado en sus plenos municipales, porque falta un municipio de tres, Tavernes. Municipio gobernado por el mismo partido que sustenta a Dora Ibars en la Generalitat. ¿Por qué el bloqueo de uno puede más que la voluntad democrática de dos?

Los ciudadanos de la Safor y de Gandia estamos siendo acosados y perseguidos por la Generalitat para evitar que nuestros ciudadanos puedan disfrutar de una Televisión Pública Comarcal. ¿Por qué el Gobierno de todos los Valencianos actúa así con los vecinos de la Safor y de Gandia?

A la Generalitat poco le ha costado montar todo un procedimiento administrativo que diera como resultado la adjudicación de una licencia de TDT al líder de la oposición de Gandia, Arturo Torro, también miembro del partido que sustenta a Ibars.

Pero frente a las amenazas y el acoso al que nos somete el PP de Valencia y de Gandia, hay que ofrecer respuestas valientes y no arrugarse frente a tanto abuso y regreso democrático al que nos quieren condenar.

Hemos visto estos días como han cerrado TV3. Acció Cultural del País Valencià, también ha sido objeto de esa persecución feroz. En Valencia aun vivimos tiempos difíciles para la libertad.

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